martes, 15 de octubre de 2013

El camino del buen caballero

No hay nada como intentar algo nuevo, te sorprenderá todo lo que encuentras y aprendes en tu camino. Gracias a la aventura de publicar mi primer libro estoy conociendo personas e iniciativas magníficas, nuevas ideas, nuevas maneras de hacer las cosas y proyectos fascinantes, hay tanto con lo que emocionarse en el mundo que parece que no hubiera tiempo para todo. Otra de las cosas buenas del libro ha sido que he intentado contárselo a todo el mundo, porque he imaginado que muchas personas querrían participar en esta aventura, y así he vuelto a entrar en contacto con varias personas de mi pasado. Muchos compañeros y maestros de otras aventuras se han sumado a esta nueva, y eso ha sido también una gran alegría, recuperar algunas personas con las que hacía mucho que no tenía contacto, es increíble todo lo que da de sí una vida, la cantidad de cosas que podemos hacer... no tengo vida para escribir libros contando todas mis aventuras, he vivido una vida magnífica, y lo que me queda!

Esta semana han contactado conmigo dos grandes maestros de mi vida, por un lado mi “chamán”, el médico privado de nuestra familia, privado porque practica una medicina no convencional que para nosotros ha resultado más eficaz. De él aprendí mucho del funcionamiento de la vida y la salud humana, física, mental y social, apasionante el concepto de salud y calidad de vida y poder trabajar uno mismo en ello. Es una persona de la que he aprendido bastante y me ha indicado unos cuantos caminos muy interesantes para mi vida, con él llevamos a cabo el experimento de transformarme en un hombre capaz de reunir unas cuantas habilidades y disciplinas interesantes, experimento que sigue en marcha, muy interesante hacer un mix así. He escrito algo sobre ello, aunque aún no lo he compartido porque es algo extenso y quizá complicado, ya lo compartiré, algo así como desarrollar nuestra propia tradición y disciplina, algo así como el bushido para los samuráis.


También ha contactado conmigo quien fuera mi primer maestro en el camino del buen caballero, si con mi chamán trabajo y desarrollo mi salud y calidad de vida, con este amigo aprendí y emprendí el camino del buen caballero. Hace unos días encontré una frase que me gusta y resume este camino “Un caballero no es aquel que sólo dice palabras bonitas, es aquel cuyos actos respaldan sus palabras bonitas”. No sólo es un lenguaje y una manera de expresarse, es una manera de entender la vida y las relaciones personales y comportarse según una ética personal. Le conocí con 14 años, fue entonces cuando tuve mi primera novia y así empezó mi aventura en este camino, con él desarrollamos las bases de nuestro propio código de conducta. Somos unos flipaos de la vida, y unos experimentadores natos, todo lo que teorizábamos lo llevábamos a la práctica en cuanto era posible, y siempre que fuera posible con humor. Eso es lo que me ganó siempre, lo que hacíamos era divertido.

Él no se consideraba un tipo atractivo, yo creo que ni él ni yo lo éramos, aún así teníamos algo que nos hacía valiosos, nuestro sentido del humor y nuestra manera de hacer las cosas. Lo primero que nos planteamos de las relaciones personales fue la pregunta “¿Para qué?”, sí, ¿Para qué quieres una pareja?. Interesantísimo punto de partida, para qué queremos alcanzar ese objetivo que nos proponemos, saber el por qué, el para qué, el qué, el cómo, cuánto, cuándo, el quién... muy interesante. Conocíamos personas que querían una pareja porque era lo normal, porque no querían estar solos, para tener sexo, porque querían tener alguien que les quisiera, alguien a quien contarle las penas, alguien que les ayudara y alegrara la vida... en fin, mil motivos, unos muy típicos otros bastante curiosos. Lo primero fue respondernos nosotros esta pregunta, ¿para qué queremos nosotros una novia?, no sé cuántas personas se han hecho esta pregunta y han barajado las respuestas y opciones posibles.


También conviene valorar los pros y los contras de este deseo. Esta es otra de las cosas que aprendí con mi amigo, y luego con algunos profes de filosofía, saber diferenciar entre deseos y caprichos. Hace tiempo leía también esta frase que me hizo gracia, “donde el amor fuera una necesidad del alma y no un capricho del culo”, hay personas que no tienen sueños o deseos, sino fantasías sexuales y caprichos, hay personas que no aman, hay quienes practican turismo emocional. Es lo que nos ha tocado vivir con las infinitas opciones que ahora tiene el ser humano, que no todos entendemos lo mismo de las mismas palabras, que confundimos conceptos e incluso a veces no sabemos ni lo que queremos de verdad. Por eso el camino del caballero, como cualquier otro camino disciplinado requiere de un profundo conocimiento de uno mismo y sus motivos motores, y eso que me encanta.

Para mí la respuesta a la pregunta de para qué quiero una pareja creo que ha sido casi siempre la misma, para compartir con ella lo que me gusta de la vida y disfrutarlo juntos. Al menos casi siempre he intentado moverme siguiendo esa respuesta, de hecho mi última pareja me conquistó con esa respuesta. Estábamos hablando sobre la vida, y siendo 14 de Febrero hablábamos sobre las parejas, ella me dijo, lo bueno de tener pareja es que tienes alguien con quien compartir todo lo que te apasiona y disfrutas. Será por cosas que nos apasionan y disfrutamos, vaya dos, jajajaja. Para qué es una pregunta que también me he hecho varias veces a lo largo de la vida... ¿para qué vivimos? ¿Por qué estamos vivos? ¿Qué interés tiene la vida en tener a estos monos tan raros haciendo cosas por la tierra? ¿Cuál es el sentido o significado de la vida? ¿Qué le aporta al mundo el hecho de que nosotros estemos vivos? ¿Para qué todo este uso de energía y recursos?


Sé que soy un rallado de la vida y que hay preguntas sin respuesta, y gracias a mi disciplina mental con eso, sigo adelante asumiendo que hay preguntas que quizá no tengan respuesta y mientras tanto intentando aportar lo mejor de mí a la vida, no sé para qué estamos aquí, más ya que estamos si podemos hagamos que sea divertido y agradable a los demás. Este es el camino del buen caballero, tratar al resto del mundo con amabilidad, aportando en la medida de lo posible calidad a la vida de los demás. Como ya decía una de nuestras frases de quirotao, no hace falta ser los mejores para dar lo mejor, todos podemos sumar calidad a la vida de los demás. Eso es lo que nos hizo diferentes frente a otros chicos más guapos o más populares, las chicas se sentían a gusto con nosotros, sumábamos calidad a su vida.

Ya ves que cosa tan complicada, algo muy sencillo que podemos hacer todos, que nuestra presencia sea agradable, no estoy diciendo que seamos lameculos, a ver si somos un poco listos. No se trata de ir sirviendo a todo el mundo, se trata de tener detalles de calidad con las personas a las que apreciamos, y si podemos con todas las personas que se crucen en nuestro camino. No digo de perder la vida por agradar a todo el que se nos cruza, digo, si es posible, que nuestra presencia sume calidad a nuestro entorno.


Pues eso, que todo un placer la vida que he vivido, las personas que he conocido y todo lo que he aprendido, ya por todo esto me doy por más que satisfecho. Lo mejor, que parece que no acaba aquí la película!! Seguimos jugando para Bingo!! A ser felices, a disfrutar la vida!! Ya que estamos aquí... :)

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