viernes, 26 de abril de 2013

Objetivos y escala de valores

Volviendo con la temática de los juegos de rol o similares. Sigo jugando al juego ese (Dragons of Atlantis), no sé si estaré perdiendo el tiempo miserablemente, pero me da para pensar mientras juego y saco mis conclusiones y parecidos con la vida. Reflexiono y me inspira para compartir más reflexiones por aquí, así que bienvenido sea :)



Como os contaba, hay foros donde te explican cómo jugar, cómo jugar mejor y dónde encontrar los objetos importantes para el juego. Encontré también un jugador que preguntaba “¿Cómo se gana este juego?” Bien, la respuesta que le dieron no tiene interés aquí. No se gana, es un juego que no acaba nunca, no hay objetivo, más allá de seguir creciendo, tener más tropas, más territorios, meterte en misiones más difíciles y así hasta que te aburras. Vale, ¿y en la vida? ¿Cómo se gana en la vida? ¿Cuál es el objetivo de la vida, la meta? ¿Es como estos juegos sin final donde el único objetivo es seguir creciendo y tener cada vez más? ¿O igual estos juegos y la vida es para disfrutar? ¿Para disfrutar mientras juegas, mientras te pones a prueba, mientras superas misiones, mientras vives?

Esta es una de las preguntas clásicas de la filosofía, ¿Qué somos? ¿de dónde venimos? ¿a dónde vamos? Pues eso, ¿Cuál es el objetivo de este juego de vivir?

Muchas veces hacemos las cosas sin pensar mucho en el objetivo o a dónde nos conducen, no nos planteamos a dónde queremos ir, o sí queremos ir realmente a donde parece que queremos ir, y lo mejor de todo ¿para qué o por qué queremos ir allí?. De aquí creo yo que salen luego muchas de las frustraciones y sensaciones de vacío de las personas, y el sueldo de psicólogos, psiquiatras y farmacéuticos. Estos se hinchan a tratar personas con depresión, bien con terapias bien con fármacos. Asusta la cantidad de antidepresivos que se venden diariamente en las farmacias, no os hacéis idea, miedo da. Hacemos cantidad de cosas creyendo que eso nos proporcionará el placer o felicidad que anhelamos, o creemos que nos falta para sentirnos mejor, y luego resulta que no. Y entonces vienen las depresiones y la sensación de inutilidad de la vida, de estar más perdidos que un hijoputa el día del padre... Pongo un poco de humor entre tanta reflexión profunda para alegrarnos la lectura, que el humor es inteligencia también, la risa es sorprender al cerebro con algo inesperado.


 

Sin entrar en paranoias ni reducciones al absurdo, que de esto también tengo experiencia, hay que pensar, sí, pero tampoco hay que pasarse, que menudos dolores de cabeza me he cogido pensando en exceso. Creo que uno debe pensar en la medida que lo necesite, y siempre con el objetivo de ser más feliz, si pensar de más te hace sentirte peor y no encuentras la manera de ser más feliz con ello, deja de pensar más allá. Si le damos demasiadas vueltas a todo perdemos las referencias y entonces caemos en las paranoias y los absurdos, tengamos precaución, cada uno debe encontrar su límite.

En el coaching, palabra que no me mola mucho porque se ha puesto de moda, y creo que con la moda se desvirtúan algunas cosas, se utilizan muchas herramientas útiles. Antes pensaba que el coaching era como la psicología para los que no tenemos depresión ni traumas. Creo que uno va al psicólogo cuando estas depre o traumatizado, cuando estás en los números más bajos de la escala anímica y buscas volver a los números de mitad de la tabla, un 5, un 7. Claro, los hay que por debajo del 7 estamos poco y somos unos motivaos de la vida y pensamos que hay números más allá del 10, para eso pensé que valía un coacher, para llevarte del 7 al 13, 15, o más allá aún. Pero claro, aquí viene la parte menos alegre, creo que uno no te puede llevar a donde no ha estado, uno solo puede hablar de lo que conoce.





Por eso muchos psicólogos están tocados y los psiquiatras más, porque pasan gran parte de su vida tratando con los números más bajos de la escala. Mis respetos y reconocimiento a todos ellos, que yo no tendría el valor de hacerlo. Pues ahora con los coacher pasa que como esta de moda, todos somos coachers... y te encuentras con algunos que podrían aplicarse sus consejos. Mi abuelo sí que es un coacher y no va presumiendo de ello ni sabe lo que es. Él tiene sentido común y la experiencia que da mucha viva vivida, sabe de los errores y aciertos que ha cometido, ha vivido mucho en su propia carne y en la de los demás, ha reflexionado sobre ello y sacado sus propias conclusiones. Se paró a pensar sobre las cosas y las consecuencias, reflexionaba.

Volviendo a las herramientas de coaching o los planteamientos sensatos de toda la vida, ¿y tú para qué dices que quieres conseguir qué? ¿Y eso a dónde te va a llevar? ¿y entonces crees que luego serás más feliz? Lo mismo con algunos juegos, ¿me quieres decir para qué almacenas tanta madera? ¿Para que la quieres? ¿Y esta construcción? ¿Y este objeto?


Una de esas herramientas útiles es la rueda de la vida, o escala de valores, podemos hacerlo como queramos. El caso es coger un círculo y repartir porciones a los campos de nuestra vida: Desarrollo personal, amistades, deporte, trabajo, propósito vital, servicios a la comunidad, familia, amor, ocio... yo que sé, los aspectos que consideréis que os importan en vuestra vida. Le dais un porcentaje de la importancia total en vuestra vida, es un ejercicio interesante plantearse qué nos importa más, ¿el ocio o los amigos, la familia o el trabajo? ¿Y en qué orden va cada cosa o cuánto porcentaje tiene cada una?

Saber qué es lo más importante para nosotros nos ayuda a la hora de tomar decisiones, siempre que a la hora de tomar una decisión nos preguntemos ¿Esto a qué suma? ¿Me acerca a mis objetivos en qué campo?. Saber la importancia relativa que tiene una cosa frente a otra también es útil. Así cuando tengamos que elegir entre trabajo y amigos, familia y trabajo, o cualquier combinación posible, sabremos cuál es más importante para nosotros y eso nos facilitará la elección. La felicidad es saber elegir, es tomar decisiones, y la disciplina es saber elegir entre lo que más queremos y lo que queremos ahora.

Yo he reflexionado bastante sobre ello, últimamente reflexiono en concreto sobre la escalada y el papel que tiene actualmente en mi vida. Conviene revisar la rueda o escala de vez en cuando, porque resulta que no es fija, va cambiando con el tiempo :) Soy un flipao de la escalada, un enfermo, lo reconozco, no puedo pasar diez días sin escalar, lo necesito, si no escalo en ese tiempo me cambia el ánimo. Fácil solución para mí, escalo dos/tres veces por semana y todo controlado, siempre feliz y animado. Já, si todo fuera tan fácil... y cuando llueve? O por lo que sea no puedo escalar? Es más, últimamente escalar para mí ya no es lo mismo, ya no es ansia de escalar, vale, no será ansia pq voy bastante a menudo y no siento esa necesidad mortal. Ahora me he vuelto sibarita, me mola escalar, sí, pero para mí escalar es mucho más que subir piedras o agarrar presas. Me he dado cuenta que lo que realmente busco de la escalada es el tiempo de calidad con mi buena gente del mundo de la escalada. Mis risas con los gansos de mis amigos, nuestros psicofallos, nuestros chistes, y mientras, escalamos un rato. También tengo mis días de necesidad física o mental de ir a escalar, de cansarme físicamente, de centrarme sólo en la escalada y parar mi mente por un rato, sólo centrarme en el movimiento.


Ordenando mi escala de valores tengo mi manera particular, se basa en quitar cosas, pensar de qué podría prescindir y en que orden, ¿qué sería lo último que querrías dejar de hacer o tener? Lo hice una vez también con las partes de mi cuerpo, ¿Cuándo dejarías de ser tú? En mi caso hasta que pierda la cabeza seguiría siendo yo. Sí, una cabeza en un frasco al estilo Futurama seguiría siendo yo, podría aún disfrutar de muchas cosas, de reírme y de pensar cosas, creo que soy tremendamente mental, me encanta jugar con la mente. Es como las necesidades básicas de la vida, podemos vivir sin comida 30-40 días, sin agua dos o tres, sin respirar dos o tres minutos. Pues para mí igual, sin escalar un mes, sin pensar... unas horas, jajajajaja.

También la rueda o escala aumenta a medida que vas satisfaciendo necesidades básicas, y empiezas entonces a sentir nuevas necesidades mas avanzadas, trascendencia, servicio a la humanidad, propósito vital... Como en los juegos, cuando ya tienes garantizada tu supervivencia empiezas a ayudar a la alianza de la que formas parte y la que en un principio te ayudó a tí. En la vida pasa algo similar, además ayudar a otros proporciona un sensación muy interesante, sentir que no eres sólo tu persona y tus éxitos, sino también parte de todos aquellos que ayudas a que los demás consigan. Muy agradable, pero ojo, no os volváis locos y salgáis a ayudar a los demás a lo loco, primero garantizaros vuestro bienestar, y luego ya sentiréis que estáis preparados para dar un paso más, andar antes que correr, correr antes que volar. Sólo quien es realmente feliz puede repartir felicidad, sólo quien realmente está bien puede transmitir esa sensación. Que también hay mucho salvavidas por ahí suelto que debería mirarse un poco el ombligo primero. Salir a barrer las casas de los demás dejando la nuestra por barrer... en nosotros tenemos trabajo para rato, no os ansiéis, ya llegará vuestra hora. Primero construir y desarrollar vuestro reino, ya llegará el tiempo de ayudar a otros y entonces vuestro gran reino podrá dar lo mejor de sí mismo por un objetivo mayor que sí mismo.

Bien, hasta aquí las reflexiones de hoy, que me vicio y me enrollo y se me va las horas y las páginas. Os voy a pedir ayuda, para ayudar hay primero que preguntar cómo podemos ayudar y quedarnos para escuchar la respuesta. Me gustaría que me ayudarais con vuestras opiniones, quiero que leer mis reflexiones sea agradable, que no sea pesado, pienso que a veces quizá puede ser demasiado largo o qué se yo... ¿Consejos? ¿Sugerencias? ¿Opiniones? Con total libertad, decir lo que penséis, en público o privado, mil gracias!!

A disfrutar la vida!! Está en nosotros! :)

4 comentarios:

  1. Ya que lo pides, ¡te doy mi opinión! Creo que tus textos son maravillosos estimulantes para la mente y el espíritu. Me fascina que tengas tanto carrete y tanta facilidad para expresar lo que piensas. Siempre acabo de leerlos con el ánimo por las nubes y la sensación de querer comerme el mundo. Las entradas suelen tener una extensión notable en relación a otros blogs pero, al leerlas, a mí no se me hacen nada largas, quizá por lo ameno del del contenido y los toques de humor. No tengo sugerencias de mejora, de momento ¡sólo admiración! jeje. ¡¡Sigue así, crack!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Joe, mil gracias!! Seguiremos así! Cualquier sugerencia, cuando salga, será bien recibida! A tope!! :)

      Eliminar
  2. ¡Hola Daniel, estoy encantado de seguirte y recibir tus entradas!
    Te escribo en esta entrada sólo para saludarte y darte las gracias. Pero podrá haberlo hecho en cualquier otra, porque es un placer leerte. Y como dice Transcriptalia, da mucho ánimo leerte, jeje ;)

    Por cierto, te descubrí hace algún tiempo buscando fotos de masaje sentado como esta... http://4.bp.blogspot.com/-NzlKJVT3sOw/UatvqEVy-kI/AAAAAAAAAXE/h2TQQxYEeKU/s1600/onsite3.gif
    Y aunque me sorprendí mucho al reconocer que practicas el mismo kata de masaje, también me alegró saber que no era el único en Spain,,, o_OMG!!!

    Estoy escribiendo un blog sobre marketing para masajistas, basado en mi aventura personal, y me encanta ver que abordas muchos temas que tengo en mente: coaching, escala de valores, herramientas, motivación, búsqueda,,, Ah, y mucha suerte con tu proyecto QuiroTao!!!

    En fin, pues eso, que muchas gracias por tus escritos. Recibe un fuerte abrazo y 1masajiko sentado desde Murcia. Banzaï!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias! me alegro que te guste! Me ha gustado lo que he visto de tu blog, lo visitaré más veces. Ya me has inspirado para un par de reflexiones! :) Me gusta tu inciativa, mucho ánimo y fuerza con todo, aquí estamos para colaborar en lo que se te ocurra! Un abrazo! :)

      Eliminar